(For Spectrum Health Beat)
Los investigadores tomaron 1,478 adultos del estudio que no habían padecido enfermedades cardíacas para los 55 años de edad y luego calcularon el tiempo que cada persona había tenido colesterol alto hasta esa edad. (For Spectrum Health Beat)

Muchas personas de entre 30 y 50 años comen hamburguesas, pollo frito y otros alimentos grasosos sin temor, imaginando que aún faltan años para preocuparse por sus niveles de colesterol.

Pero las nuevas investigaciones revelan que la exposición a largo plazo a niveles de colesterol ligeramente altos puede llegar a dañar la salud cardíaca futura de una persona.

Los investigadores informaron, en la publicación Circulation, en línea, que las personas de 55 años que vivieron con colesterol alto entre 11 y 20 años mostraron correr el doble de riesgo de padecer enfermedad cardíaca en comparación con las personas de esa edad que solo tuvieron colesterol alto entre uno y 10 años, y el cuádruple de riesgo en comparación con personas que tuvieron bajos niveles de colesterol.

“El tiempo durante el cual una persona tiene colesterol alto aumenta su riesgo de padecer enfermedades cardíacas por encima del riesgo que implica su actual nivel de colesterol”, dijo la autora del estudio, la Dra. Ann Marie Navar-Boggan, residente de cardiología del Duke Clinical Research Institute en Durham, N.C. “Los adultos que estuvieron expuestos por más tiempo al colesterol alto corrían un riesgo cuatro veces mayor de padecer enfermedades cardíacas en comparación con los adultos que no tenían colesterol alto”.

Navar-Boggan y sus colegas llegaron a la conclusión de que por cada 10 años que una persona ha tenido colesterol apenas elevado entre los 35 y 55 años de edad, su riesgo de padecer enfermedades cardíacas aumenta casi un 40%.

“Cuando tenemos entre 30 y 50 años, sentamos las bases de nuestra salud cardíaca futura”, dijo.

Para este estudio, parcialmente financiado por la  Agencia de Investigación y Calidad de la Atención Médica de los EE. UU. (U.S. Agency for Healthcare Research and Quality), los investigadores confiaron en los datos del estudio cardíaco Framingham, una de las investigaciones en curso más grandes enfocada en la salud cardíaca. Desde 1948, las familias de la ciudad de Framingham, Mass., han permitido a los investigadores hacer un seguimiento de su salud.

Los investigadores tomaron 1,478 adultos del estudio que no habían padecido enfermedades cardíacas para los 55 años de edad y luego calcularon el tiempo que cada persona había tenido colesterol alto hasta esa edad.

En este estudio definieron el colesterol alto de manera muy conservadora, fijándolo en el entorno de los 130 mg/dl de colesterol “malo” (lípidos de baja densidad o LPL), un nivel que los  Institutos Nacionales Estadounidenses del Corazón consideran el extremo inferior del colesterol “apenas alto” (borderline).

Posteriormente, los investigadores hicieron un seguimiento a estos adultos por hasta 20 años después de los 55 años de edad para ver cómo afectó su exposición al colesterol alto su riesgo de padecer enfermedades cardíacas.

Los resultados mostraron que la “dosis” de colesterol alto a largo plazo de una persona parece afectar directamente su riesgo futuro de padecer enfermedades cardíacas:

Los participantes que habían tenido colesterol alto entre 11 y 20 años corrían un riesgo general de padecer enfermedades cardíacas de 16.5%.

Aquellos con uno a 10 años de exposición al colesterol corrían un riesgo del 8.1%.

Los que no tenían colesterol alto al comienzo del estudio corrían un riesgo de padecer enfermedades cardíacas de solo el 4.4%.

Navar-Boggan comparó la exposición prolongada al colesterol alto con el concepto de “años paquete” del tabaquismo, donde los médicos evalúan el riesgo de salud de una persona mediante la determinación de cuánto fumaban y por cuánto tiempo lo hicieron.

“En realidad debemos pensar en el colesterol de la misma manera”, dijo. “¿Qué son sus años de colesterol?”

El Dr. Robert Eckel, ex presidente de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association), dijo que si estos resultados nuevos se confirman en estudios futuros, podrían influir en las pautas sobre el uso de estatinas para bajar el colesterol.

Con las pautas actuales, se habría recomendado tratamiento con estatinas solo a uno de cada 6 adultos en este estudio con exposición prolongada al colesterol alto a la edad de 40 años, y a uno de cada 3 a la edad de 50 años, según dijeron los investigadores.

“Solo el 15% habría reunido los criterios para el tratamiento con estatinas, y eso sugiere que la pauta no era adecuada para pacientes en esta área de riesgo” dijo Eckel, catedrático de medicina del Campus médico Anschutz de la Universidad de Colorado en Denver (University of Colorado Denver). “El estudio identifica personas que deberían haber sido tratadas, donde las pautas dicen que no reúnen los criterios para el tratamiento”.

Pero Navar-Boggan se muestra precavida respecto a dar el salto de recomendar estatinas a personas de entre 30 y 45 años de edad.

Las personas de entre 30 y 39 años de edad deben someterse a evaluaciones de colesterol alto al menos una vez, dijo. Quienes tengan colesterol alto a esa edad, primero deben intentar bajar esos niveles mediante ejercicio y una dieta saludable para el corazón.

“Debemos tener cuidado al interpretar que esto dice que las personas de 30 y tantos años de edad deben comenzar a tomar una estatina. Eso los compromete potencialmente a tomar un medicamento durante décadas de su vida”, dijo, y señaló que se sabe poco sobre los efectos del uso de la estatina a largo plazo en la salud.

Para obtener más información sobre los niveles de colesterol, visite el sitio de los  Institutos Nacionales de la Salud de EE. UU.